
DISPAR FOOD
La gastronomía muchas veces se sumerge en las modas o en la copia de tendencias mundiales y todo eso generalmente no llega a buen puerto, en el caso de la cocina étnica o de ciertas culturas cuando es una réplica que ignora manos reales que cocinen efectivamente desde sus genes, la cosa ya tiene sabor a otra cosa. Sin embargo, aparecen lugares donde quienes regentean y comandan la cocina efectivamente son originarios de los platos que pregonan y ahí si el viaje a esos sabores resulta una experiencia enriquecedora. Como ocurre con este reducto y los aromas venenezolanos.










































